A los hijos del Rock And Roll III

Antes de nada quería pedir disculpas por el corte de ritmo tan brutal que ha tenido el blog la última semana. La vida del estudiante es muy dura, hay exámenes y bla, bla, bla.....

El caso es que se nos echa el tiempo encima y no tenemos con qué frenarlo. Por ello, pedimos a todos nuestros fans, los cuales han estado llorando noche tras noche nuestra ausencia (no intentéis negarlo, ¡lo sabemos!), que nos perdonen por el ritmo que pueda llevar este blog durante el próximo mes. En cualquier caso, sacaremos minutos de donde sea para dejaros alguna que otra de nuestras perlas.

Para el post de hoy, quería retomar de nuevo la maravillosa saga "A los hijos del Rock and Roll", nuestro pequeño homenaje al rock del s.XXI. En esta ocasión, os traemos un grupo que no supone ninguna sorpresa. Llevan en escena desde el 2004, vienen de Australia y, aunque sólo cuenten con un LP en su carrera, tienen material más que de sobra para dar muestra de su talento.

Hablemos de Wolfmother.

Reconozco que cuando oí hablar por primera vez de este grupo y ví la gran cotufa que se gastaba el cantante, pensé que nos encontrábamos ante otro caso de alternativismo agudo (ya sabéis, en este blog puede que posteemos una película en hebreo, pero tenemos el poder de marcar un límite en cuanto a gafapastismo se refiere...). El caso es que este primer contacto ocurrió mientras echaba un vistazo al cartel del Azkena Rock Festival 2006, dónde pretendía ir con toda la ilusión a ver a mis queridísimos Pearl Jam. Pensé que no tenía mucho sentido que en un festival tan clásico cómo el Azkena, actuara un grupo que tenía toda la pinta de haberse escapado de un concierto de los Strokes, pero decidí darles una oportunidad y verlos en directo...Vale, miento, si los ví fue porque tocaban justo antes de Vedder&Co. y cómo buen fan, tuve que tragarme todos los conciertos anteriores para aguantar estoicamente en primera fila. A pesar de todo, puedo decir que fue una decisión acertada y que tuve la suerte de poder ver uno de los directos más potentes de mi corta vida festivalera. Al ver a sólo tres músicos llenando tanto espacio, no pude sino acordarme de unos primerizos Nirvana invadiendo estadios con su música (no malinterpreten, no los estoy comparando) y, ver al bajista combinando las cuatro cuerdas con el teclado y los sintetizadores la verdad es que ayudaba bastante a crear ambiente; realmente se podía ver cómo disfrutaban de la música.

Después del festival comencé a oír hablar de este grupo cada vez más y, algunos de sus temas cómo Woman o Joker & the Thief empezaron a sonar bastante en televisión. La mala noticia vino cuando hace aproximadamente medio año, me enteré de que su cantante y líder, Andrew Stockdale, había decidido dar puerta a sus dos compañeros al más puro estilo Axl Rose. Una pena, aquello olía a subida de ego monumental y sin solución de continuidad. Pero no todo estaba perdido, Stockdale consiguió los derechos de Wolfmother (¿seguro que no tendrá Rose cómo segundo apellido?) y se preparó para un nuevo LP. La primera muestra del mismo nos llegó hace poquito y la verdad es que, por suerte, no se echa en falta a ninguno de los anteriores componentes del grupo. Ahora habrá que esperar el resultado final de Mr. Cotufa y su banda, aunque todo apunta a que seguirá derrochando talento en cada canción...crucemos los dedos.
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