Mi particular oda al post-it

El post it. Pegajosas hojitas amarillas que día tras día recogen millones de ideas, anotaciones o recordatorios, en bibliotecas, colegios, universidades y puestos de trabajo de todo el mundo.

Sin duda la clave del éxito de estos(en su mayoría) amarillos papelitos es su adhesivo. Ni demasiado fuerte ni demasiado flojo...el nivel justo para pegarse en multitud de superficies pero poder retirarlos sin que causen desperfectos ni dejen residuos. El nivel exacto de "pegajosidad".


La idea nació cuando Spencer Silver, un trabajador de la empresa 3M, estaba desarrollando un adhesivo extremadamente resitente, aunque sin éxito. Tras varias pruebas, solo consiguió inventar un pegamento débil, que pegaba poco, en 1968.

Así, un domingo años más tarde su compañero Art Fry se dió cuenta durante una misa de que los papelitos que marcaban los salmos caían continuamente al suelo, y que podía utilizar el pegamento de Silver para pegarlos temporalmente. Corría 1974, y el nacimiento del primer post-it.

Pronto, 3M comenzó a comercializarlos y en solo unos años se expandieron por todos los rincones de Estados Unidos, y algo más tarde por Europa, hasta convertirse en una pieza importante del funcionamiento de cada oficina.

Por último, no quisiera dejar pasar este momento sin incluír dos obras geniales hechas a base de papelitos pegajosos de colores que he visto últimamente. La primera, es el último trabajo de Deadline, hecho en stopmotion:


El segundo, de mano de los creadores de los Extreme Mentos and Cola experiments, Extreme Sticky Note Experiments:


Curioso como algunos invierten el tiempo, no?!
El post-it, otra idea que se nos tenía que haber ocurrido a nosotros...
Saludos bourboneros!!